En el último webinar de ImpactE titulado «Optimización de la operativa de tus autoconsumos: Centraliza, detecta y actúa con alarmas inteligentes», se trataron diversos temas cruciales para mejorar la gestión de las instalaciones fotovoltaicas y de autoconsumo. ¿Cómo las soluciones presentadas pueden transformar la operativa diaria de los autoconsumos?
El reto de la centralización de la información
Uno de los principales retos al gestionar autoconsumos es la dispersión de la información en múltiples plataformas. Las instalaciones de diferentes marcas de inversores a menudo requieren que los usuarios accedan a diversas herramientas para obtener datos, lo que complica la gestión operativa. Existen plataformas, como E·Manager, que se enfocan en centralizar todos estos datos, permitiendo que los usuarios gestionen y monitoricen sus instalaciones desde un único punto.
Esta centralización simplifica enormemente la operativa, reduciendo la necesidad de saltar entre plataformas y optimizando el tiempo de gestión, especialmente en situaciones críticas. Además, permite un acceso más eficiente a la información de consumo y rendimiento, lo cual es esencial para tomar decisiones rápidas y acertadas.
La Importancia de las Alarmas Inteligentes en la Gestión de Autoconsumos
Uno de los aspectos más innovadores y valiosos presentados en el webinar de ImpactE es el sistema de alarmas inteligentes. Estas alarmas no solo actúan como una herramienta de notificación ante fallos o anomalías, sino que también sirven como un mecanismo proactivo para la gestión eficiente de las instalaciones fotovoltaicas en los siguientes puntos:
- Detección temprana de problemas operativos
En la gestión de autoconsumos, uno de los mayores retos es la detección rápida de problemas que puedan afectar al rendimiento de las instalaciones. Las alarmas inteligentes permiten que los operadores reciban notificaciones de manera inmediata cuando se detecta un problema o una irregularidad en el funcionamiento de la planta. Esto incluye fallos en el sistema de producción, caídas de rendimiento o problemas con la conexión a la red.
Por ejemplo, si la instalación deja de generar energía por un fallo técnico o si se produce una pérdida de rendimiento, las alarmas inteligentes alertan al operador para que se pueda intervenir lo antes posible. Este tipo de intervención temprana previene pérdidas económicas y asegura que la instalación siga funcionando con la máxima eficiencia.
- Monitorización de parámetros clave
Las alarmas inteligentes no solo se centran en la detección de fallos, sino que también permiten la monitorización continua de parámetros clave como: la producción de energía, el consumo y el autoconsumo, entre otros. Los gestores pueden configurar umbrales para que, si alguna de estas variables se desvía de los valores esperados, se active una alerta.
Por ejemplo, si el porcentaje de autoconsumo de una instalación baja por debajo de un umbral predefinido, el sistema enviará una notificación para que se pueda investigar si existe algún problema en el sistema o si la instalación necesita una revisión o ajustes.
- Reducción de costes operativos y mantenimiento predictivo
Las alarmas inteligentes permiten implementar un enfoque de mantenimiento predictivo, que ayuda a identificar problemas antes de que se conviertan en fallos graves y costosos. Al recibir notificaciones sobre comportamientos anómalos, los responsables pueden programar mantenimientos preventivos en lugar de tener que lidiar con reparaciones urgentes y costosas.
Por ejemplo, si una de las instalaciones presenta un rendimiento por debajo del esperado, es posible que sea necesario realizar una limpieza de las placas solares o verificar el estado de los inversores.
- Mejor toma de decisiones y agilidad operativa
Las alarmas inteligentes no solo permiten recibir notificaciones sobre incidencias, sino que también proporcionan información clave para la toma de decisiones. Al tener los datos de cada instalación al alcance de la mano, los gestores pueden tomar decisiones más informadas y actuar rápidamente, lo que mejora la agilidad operativa.
En caso de que una alarma indique un problema, el gestor puede, por ejemplo, ajustar la configuración del sistema o redirigir los recursos para abordar el problema sin necesidad de esperar a una intervención manual.
Optimización: personalización y flexibilidad de las alarmas
Lo que diferencia a las alarmas inteligentes de otros sistemas tradicionales es su capacidad de personalización. En la plataforma de ImpactE, los usuarios pueden ajustar las alarmas según las necesidades de cada instalación o proyecto. Es decir, se pueden configurar alarmas para alertar sobre parámetros específicos, como el rendimiento, el consumo o el autoconsumo, y adaptarlas a los requisitos de cada cliente.
Por ejemplo, si un cliente tiene una instalación fotovoltaica de autoconsumo colectivo, el sistema puede enviar alertas si el consumo de los participantes cae por debajo de un nivel determinado o si la planta está produciendo menos de lo esperado.
Integración con plataformas de facturación y gestión
Un aspecto fundamental del autoconsumo colectivo es la integración de sistemas de facturación. La automatización de procesos, como la integración con plataformas de facturación, simplifica la gestión de la facturación mensual y permite una mayor transparencia para los usuarios.
Con esta solución, ImpactE ha facilitado la optimización de los coeficientes dinámicos para el cálculo de ahorros, lo que resulta en un incremento de hasta el 30% en los ahorros adicionales, al tiempo que se mejora la tasa de autoconsumo en casi un 40%.
Aprende más de esto visitando el video sobre el webinar, donde verás cómo funciona dentro de la plataforma:
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